Iker Casillas, la NO despedida de un gigante.

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Dieciséis años siendo el arquero titular del Real Madrid, el club más grande del mundo; el segundo jugador con más partidos disputados en el club después de Raúl, otro grande. Con la selección mayor española ha participado desde el año 2000, y es actualmente el jugador que más veces ha representado a España en partidos internacionales; desde joven se ha convertido en una ficha inamovible dentro de las dos escuadras y ha sido un embajador fiel y constante del fútbol español.

Iker Casillas ha estado presente, y ha sido estandarte, en los momentos históricos más importantes a nivel futbolístico de su país. Este hombre, con su selección lo ha ganado todo; Campeón Europeo Sub-15 (España 1995), Campeón Europeo Sub-17 (Alemania 1997), Campeón Mundial Sub-20 (Nigeria 1999), Campeón Eurocopa (Austria y Suiza 2008), Campeón Mundial (Sudáfrica 2010) y Campeón Eurocopa (Polonia y Ucrania 2012). Sorprendente.

Con su club, hasta hace poco el único club de su carrera, el Real Madrid, la historia no ha sido distinta: 5 Ligas Españolas, 4 Supercopas de España, 2 Copas del Rey, 3 Champions Europeas, 2 Supercopas Europeas, 1 Copa Intercontinental y 1 Mundial de Clubes. Fascinante.

Cómo olvidar aquella parada contra Robben en la final del mundial de Sudáfrica 2010, aquel mano a mano en que salió victorioso y que cooperó para que su país fuera campeón del mundo. Aquellas copas que levantó como capitán de su club, incluyendo la era galáctica, hasta aquellas últimas en el 2014. Iker es un icono, un sinónimo de la frase "mejor arquero del mundo", un sinónimo del "Real Madrid", un sinónimo de "España Campeón del Mundo".

Iker se convirtió en suplente de su equipo por casi una temporada completa; Mourinho, ese entrenador adorado por unos y detestado por otros (muchos otros) fue quien lo relegó. Siempre se dijo que la causa del roce entre Mou y Casillas fue su aparente "tráfico" de información privada de camerino a su actual esposa, Sara Carbonero, periodista deportiva. Con lo que el DT portugués decidió que la mejor manera de castigar al capitán era tenerlo sentado en el banquillo, Diego López fue su sustituto. Al parecer este fue el momento inicial de su declive, se convirtió en notorio ese deterioro de su imagen y de su autoconfianza; con la salida de The Special One del Real Madrid tiempo después, las cosas mejoraron un poco para Casillas, sin duda, contaba con el apoyo de Ancelotti, el nuevo DT merengue en ese momento.

Sin embargo, el mundial del 2014 en Brasil, fue espantoso para España y para el icono Casillas. Al parecer Robben y su equipo tomaron revancha de aquella final en el África, y su primera presentación en la Copa fue una pesadilla: Iker se vio lento, desganado, triste, humillado; y dos juegos después se acabó su mundial. Esa imagen desganada de Iker continuó, y se agravó con la llegada del costarricense Keylor Navas al mejor equipo del mundo. Una competencia real, un arquero de alto nivel, a su lado, en su mismo camerino, ganándose el cariño de la gente, de su gente; un duro golpe más. A pesar de todo esto, Casillas se mantuvo como el arquero titular hasta finales de la temporada 2014-2015 en el club, con su nivel en ascenso y notables mejorías en su confianza y su comportamiento en el campo; pero no bastó, un nuevo DT pudo haber influido en lo que sucedería a continuación, Rafael Benítez, al parecer, sacudió un poco su comodidad como titular y puso en duda su continuidad en el equipo para la temporada 2015-2016.

¿A eso le llaman despedida?

Si su nivel se deteriora, si no juega igual, si los años le empiezan a pasar por encima y a ser más notorios cada vez; se le debe respetar, esperar, darle tiempo, se lo merece. Si por razones del destino se debe marchar, pues que se marche, pero con despedida, con una despedida real, con agradecimientos, por la puerta grande, con un estadio abarrotado de aficionados coreando su nombre. Diciéndole adiós a su héroe.

Se fue, se fue San Iker, hará falta su presencia, pero la vida sigue.

En el marco merengue por ahora está únicamente el grande Keylor Navas, y la novela de De Gea continua, lo importante es que está bien resguardado, el costarricense tiene condiciones para sobresalir. Y por el lado del Oporto también deben estar tranquilos, ahora será resguardado por San Iker, quien sin duda seguirá cosechando triunfos donde sea que se encuentre.

Adiós gigante, los merengues te echarán de menos.